20170416 Parque Natural de los Altos de Ason

22 abril, 2017 · by berni · in ACAKE

PARQUE NATURAL DE LOS ALTOS DE ASON (BUSTALVEINTE)

CRONICA

Se trataba de la primera convocatoria de Senderismo en el ámbito de la Asociación Cultural de Artzentales Kultur Elkartea (ACAKE). El objetivo: visitar el Parque Natural de los Altos de Asón y conocer de primera mano los bellos parajes que esconde. Fuimos 6 personas: Jon, Luis, Pepe, Inma e Irati. El primer tramo del recorrido, unos 3 kilómetros, discurrió por una pista de tierra que nos acercó al Alto de la Posadía.

Toda la zona del Parque es resultado del efecto de los glaciares que cubrieron estas tierras hace mucho, mucho tiempo. Esto que veis es un POLJÉ, denominado Poljé de Brenavinto, depresión kárstica cerrada de planta no circular y notables dimensiones, que deriva de una acentuada concentración de los procesos de disolución en el área. Se presenta como un área llana, de topografía cóncava en forma de cubeta, enmarcada por paredes escarpadas y con un fondo plano cubierto por materiales finos sedimentados. En este ambiente calizo los materiales de rellenos suelen ser arcillas de descalcificación. Con el agua de lluvia la roca caliza pierde los carbonatos por disolución, mientras los componentes no carbonatados e insolubles de la roca quedan acumulados en el lugar. Esta acumulación da lugar a suelos ricos en sustancias minerales y metálicas que son de provecho para uso agrícola y ganadero. El drenaje interior es bien visible. Se realiza a través de canales subaére0s que derivan el agua de la lluvia hacia un lugar denominado ponor, nombre que recibe el punto de captación, y que conduce el caudal hacia la circulación subterránea. Cuando la capacidad de admisión de esa red subterránea se ve superada, en épocas de mucha precipitación, el suelo del poljé suele aparecer inundado, pues su drenaje superficial no es posible por la morfología del relieve circundante.

Este año las lluvias han brillado por su ausencia y como veis el Poljé esta prácticamente seco. Esta otra foto presenta el Poljé inundado.

Desde el alto de la Posadía bajamos a lo profundo del Poljé y caminamos por el hasta las cabañas que se encuentran al pie del Circo Glaciar.

Desde allí y en suave ascenso seguimos las marcas del recorrido denominado Bustalveinte. La panorámica del «Colina», algún otro día lo haremos, era especialmente bonita. Su cima achatada lo delataba en la lejanía.

El sendero de Bustalveinte discurría por un bello bosque de hayas.

Cerca de este lugar paramos a dar cuenta de un buen hamaiketako. No hay foto pero os aseguro que se trato de un esplendido hamaiketako.

Después vino la grata sorpresa que yo quería mostrar a Jon y a Luis. Uno de los cañones más espectaculares del Parque Natural de los Altos de Asón. No se exactamente cual es su nombre, pero yo le llamo el Cañón del Collado de los lobos.

¡Impresionante!, ¿verdad?.

En la zona hay otro cañón más largo y mucho más estrecho, denominado los Castros de Horneo, por donde otro día organizaremos una travesía.

Después de visitar este espectacular cañón, nuestro próximo objetivo era alcanzar de nuevo el Alto de la Posadía. Lo que se ve en la siguiente fotografía son Los Campanarios.

De nuevo el poljé de Brenavinto, visto desde el otro lado.

Una muestra de la magnifica flora de este Parque Natural donde existen especies endémicas. Al fondo el Pico de La Mota.

Al volver pasamos por lugares con una magia especial.

Alcanzado el Alto de la Posadía volvimos a desandar la pista que nos llevaba de nuevo al coche. Durante el recorrido pudimos apreciar lo que se llama un haya mielera.

Antiguamente obtenían la miel de ellas echando a las abejas con humo haciendo fuego en su interior.

Una muestra de los «muros secos» que se construyeron en estos lares para separar terrenos y evitar el escape de animales. Perfectas piedras colocadas unas encima de otras. Propios de los valles pasiegos.