20170422 Los Valles Pasiegos Burgaleses (Río Trueba)

25 abril, 2017 · by berni · in ACAKE

POR LOS VALLES PASIEGOS BURGALESES (CURSO DEL RÍO TRUEBA)

CRONICA

Esta segunda salida del grupo de Senderismo de ACAKE no se publicitó. Así y todo fuimos 6 personas: Rafa, Luis, Jon, Oskar, Maite y yo. Se trataba de realizar un suave paseo por los Valles Pasiegos Burgaleses (Zona norte de Burgos), recorriendo el curso del río Trueba, desde Las Machorras hasta las cascadas de Guaguera, muy cerca del nacimiento del río Trueba. El día esplendido. Al tratarse de una travesía tuvimos que organizarlo con dos coches. Uno de ellos lo llevamos al punto de destino, dejando antes a Maite, Jon, Rafa y Luis en Las Machorras, para que nos sirviera para volver de nuevo al punto de inicio de la marcha.

Saliendo de la aldea de Las Machoras en dirección a cualquiera de sus tres puertos de montaña, estaremos adentrándonos en los más profundo de los Valles Pasiegos de la provincia de Burgos. Las diferencias entre estos valles y los Valles Pasiegos pertenecientes a Cantabria es en primer lugar la extensión, los cántabros son bastante más extensos y poblados, siendo de más altitud los Burgaleses.

En estas laderas y valles habita lo que queda de un pueblo tan antiguo como misterioso: Los pasiegos. La forma de vida de este enigmático pueblo gira en torno a las vacas lecheras y al máximo aprovechamiento de los pastos, empleando para ello la práctica trashumancia. Durante los meses más cálidos, los pasiegos suben sus enseres y ganado a la cabaña más alta de la que disponen, este movimiento se denomina muda, aprovechando así los pastos de altura durante la época de más calor, soportando mejor las altas temperaturas en las zonas altas y frescas, mientras que durante los meses fríos el proceso se lleva a cabo a la inversa, familia y ganado descienden a otra cabaña situada en el fondo de los valles, donde la rigurosidad del clima de montaña invernal es algo más llevadero. De esta zona son típicos los productos derivados de la leche tales como los sobaos o distinta variedad de quesos que suponían una importante fuente de ingresos para el pueblo pasiego. Es sin duda una forma de vida tan anticuada como sufrida la que los habitantes de estos valles han traído hasta nuestros días. Hoy es evidente que cada vez quedan menos y que están condenados a la extinción (fuente web merindades palmo a palmo).

Una vez que Oskar y yo volvimos de dejar el coche en la cascada de Guarguero, iniciamos los 6 la travesía. La salida la iniciamos dejando el río Trueba a nuestra izquierda una vez atravesado un puente en la parte norte del pueblo. El camino discurre entre prados verdes, cerrados con perfectas hileras de muros de piedra que los delimitan. Una vez dejamos Las Machorras el camino se empina levemente y discurre por una zona de piedras.

Llegando a la carretera que sube al Puerto de Lunada un magnifico cartel nos indica la multitud de senderos señalizados que se pueden hacer. Lo de este pueblo es un ejemplo, digno de ser seguido, con ese trabajo tan estupendo que han realizado señalizando todas sus riquezas naturales que son muchas. Algún día tengo la esperanza de que algo parecido hagamos en nuestro valle.

Nuestro destino la Cascada de Guarguero.

Durante el recorrido se puede apreciar la bonita reconstrucción de algunas de esas cabañas de los pasiegos.

También vimos alguna que otra reliquia automovilística.

A partir de aquí el camino se puso ligeramente cuesta arriba, teniendo su recompensa en que las vistas empezaron a ser mejores.

Es Jon. ¿Habrá encontrado algún preciado perretxico?

Pasamos del valle de Lunada al Valle del Trueba y comenzamos a disfrutar de su magnifica estampa.

¡Y llegó la hora del hamaiketako!. Dimos cuenta de una suculenta tortilla de pimientos que había preparado Maite. La pena es que ya nos ha dicho que no nos acostumbremos.

Estábamos de cine, pero no nos quedaba otra que continuar la marcha. A partir de aquí ya caminábamos junto al río Trueba. La pena el poco agua que traía.

¡Y llegamos a nuestro destino!: La cascada de Guarguero.

A pesar del poco agua la cascada estaba muy bonita. En el verano tiene que ser una gozada darse un baño en su poza. En la zona hay mesas y asadores y ya tenemos en mente volver a repetir con el grupo de ACAKE y que nuestro masterchef Jokin (con ayuda por supuesto) nos prepare algo para comer.